Abril 21 del 2021
Ante la grave crisis social que afecta a nuestro país, y un gobierno que constantemente boicotea y reprime las legítimas y urgentes necesidades de nuestro pueblo, las organizaciones de nivel superior de la minería, organizadas en CTMIN, hemos acordado abandonar y romper cualquier espacio de relaciones con representantes de este gobierno.
Pese al evidente desgaste y falta de legitimidad del gobierno, habíamos mantenido una mesa de trabajo en torno a las consecuencias de la pandemia, y aportar propuestas para mejorar la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores y trabajadoras tanto directos como contratistas de la mediana y la gran minería.
Seguiremos participando en las mesas que convoque el Colegio Médico y sus estructuras regionales, y en esos espacios canalizaremos los planteamientos de nuestras bases.
Al mismo tiempo, hemos acordado convocar a la familia minera a reflexionar, tomar conciencia y empatizar con el sentir de nuestro pueblo, que es el legítimo dueño de las riquezas mineras que explotan las empresas privadas y estatales de las que somos parte.
Estamos conscientes de las limitaciones que implica tanto la pandemia como las políticas de control represivo y antisindical para hacer efectivas movilizaciones. No olvidemos que este gobierno ya ha invocado la Ley de Seguridad del Estado en contra de la dirigencia sindical minera en movilizaciones pasadas.
Sin embargo, hacemos el llamado a convocar a las asambleas de bases a todo nivel y que se delibere acerca de cuál es el rol que en este momento histórico de Chile nos corresponde jugar.
Y, especialmente, a hijos y nietos, parejas, amigos, hermanos, primos y todos quienes forman parte de la familia minera, a poner este tema en el debate y sumarse a todas las movilizaciones ciudadanas que se convoquen para expresar el amplio malestar social que hoy recorre nuestro país.
No podemos seguir pasivos ante un gobierno que abandona a su gente a consumir sus propios ahorros para enfrentar esta crisis mal administrada.
Sabemos el impacto que en la economía genera cualquier decisión que las asambleas acuerden hacer efectivas, pero nuestra responsabilidad como movimiento sindical es ser protagonistas de una solidaridad activa con las familias que sufren con la crisis.
Adicionalmente, cada organización el marco de la autonomía sindical definirá las formas específicas en que participarán en estas iniciativas y otras que definan.
Porque sí nos importa Chile, somos parte de esta historia
Coordinadora de Trabajadoras y Trabajadores de la Minería